“Bienvenidos al Alcázar de Sevilla, el Palacio Real en uso más antiguo de toda la Península Ibérica… y seguramente de los más antiguos del mundo.”
Y así, es como me gusta comenzar la visita guiada por esta maravilla de conjunto, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987.
Primero de todo, me voy a presentar: Mi nombre es Isabel, sevillana, por la gracia de Dios, e historiadora, por la Universidad de Sevilla. Tengo la suerte de dedicarme al trabajo mas bonito del mundo (para mi): interpretar el patrimonio.
Cuando visitas Sevilla, hay una serie de monumentos que no puedes perderte, de manera casi obligatoria, y ellos son: Catedral, Plaza de España y Real Alcázar. ¿Que si hay más monumentos? muchíííísimos mas, pero siendo realistas, las tendencias actuales nos indican que el turista pernocta una media de dos noches en la ciudad, así que si es la primera vez, hay que ir al grano.
Hoy tengo una misión: convencerte de que una de las primeras cosas que hagas cuando vengas a Sevilla, sea visitar el Alcázar, y por supuesto de nuestra mano.
Para empezar con todo esto, vamos a introducirnos un poco en su historia. ¿Qué es el Alcázar? El lugar de residencia del dirigente musulmán. Para que nos entendamos, es como si decimos Palacio Real. Podemos encontrar otros tantos por Andalucía, como el Alcázar de los Reyes Cristianos, en Córdoba, o la Alcazaba de Málaga, también muy recomendables de visitar, pero ya hablaremos otro día de ellos.
El nuestro, comenzó a construirse allá por el siglo XI, cuando las autoridades musulmanas, decidieron construir una fortaleza, en un lugar estratégico de la ciudad, para su defensa. El Alcázar, comenzó, de esta manera ampliándose durante el resto del periodo musulmán, sobre todo con la llegada de los almohades en el siglo XII. Pero ahí no acabó la cosa, porque cuando Fernando III conquistó la ciudad de Sevilla en 1248, se tomó como residencia Real, y los sucesivos reyes que han pasado por el Alcázar, no se han quedado atrás construyendo maravillas.
Intentando llevar un orden cronológico, a continuación vamos a ver qué es lo que no te puedes perder de ninguna manera cuando visites este monumento. ¡Al lío!
Patio de la yesería
Como puedes ver, es un pequeño patio rectangular con una alberca en el centro, descubierto por Tubino a finales del siglo XIX. Si te fijas en la decoración que tiene el arco central, con una especie de “rombos”, a eso se le llama decoración con labor de sebka, típica almohade sevillana del siglo XII. Si te fijas en la torre de la Giralda, podrás comprobar que la decoración es del mismo estilo.
Sala de la Justicia
Junto al lado del Patio del Yeso, damos con la Sala de la Justicia, que fue mandada hacer por el rey Alfonso XI, a mediados del siglo XIV. Es especialmente interesante porque es la primera construcción mudéjar que se hace en el Alcázar de Sevilla. Fíjate en su decoración con labor de yesería, donde se va reproduciendo de manera esquemática la naturaleza, mezclado con elementos de emblemas castellanos, como escudos. No tiene desperdicio ninguno, una maravilla.
Palacio Mudéjar
Para muchos, la joya de la corona. El palacio mudéjar fue una construcción del siglo XIV, que mandó a realizar el Rey don Pedro I, el cruel o el justiciero. ¿Te recuerda a la Alhambra, verdad? Es completamente normal, porque los palacios nazaríes, fueron hechos en la misma centuria, realmente estaríamos hablando del mismo estilo artístico, aunque la denominación sea diferente.
Palacio gótico
Fue la primera zona del Alcázar en construirse tras la conquista, por el rey Alfonso X, el Sabio, en 1254. Aunque el estilo es gótico, si es cierto que cuenta con obras de mejoras y rehabilitación, de estilo barroco, realizadas tras el terremoto de Lisboa de 1755. Debes pasear pos su capilla, donde vas a alucinar con sus azulejos, o el salón de las Bóvedas. Aunque, a título persona, lo que no puedes dejar pasar es la Sala de los Tapices, en el que se cuenta la batalla de Túnez. Hay 6 tapices de una serie de 10, el resto se encuentran en Madrid.
Baños de Doña María de Padilla
La mejor zona del Alcázar para el verano, son estos baños construidos originalmente en el siglo XII, reformados por Alfonso X y remodelados posteriormente en la época del Felipe III, haciendo una fuente de estilo manierista al final, de la aún se puede observar algo. Recibe el nombre de Doña María, porque cuenta la leyenda, que Doña María de Padilla, amante del rey Don Pedro I, se bañaba en este aljibe, y después, el rey hacía a sus visitantes beber de este agua antes de empezar audiencias. (Sí, el rey este era bastante particular,…)
Los jardines del Alcázar de Sevilla
Igual de importante que la visita a los palacios, es la de los jardines. Prácticamente encontramos la Historia de la jardinería en este espacio. Por destacarte los puntos más importantes, no puedes perderte:
- Jardín del chorro. Lo localizarás por ser una alberca con una escultura de Mercurio en el centro. Ahí llegaba el agua de los caños de Carmona para regar los jardines.
- Jardín de la Danza, jardín de Troya, jardín de la Galera, jardín de las Flores. Son pequeños jardines que se encuentran contiguos a la muralla baja. Encontrarás magnolios, palmeras, ficus, palo borracho,…
- Jardín del laberinto, jardín de las Damas y jardín de Carlos V. Estos jardines se encuentran en zonas que antiguamente eran de huertas. No te pierdas el pabellón de Carlos V.
- Jardín de los poetas y jardín del marqués De la Vega-Inclán. Se encuentran al otro lado de la muralla que cercaba el Alcázar, en zona de huertas. Estos jardines fueron trazados a comienzos del siglo XX.
- Jardín inglés. Antiguamente fue la huerta de la Alcoba, pero actualmente, como su nombre indica, es un jardín de estilo inglés. Nogales, hayas, pinos canarios, encinas o robles, entre otros, crean una atmósfera de luz suavemente matizada por sus copas. ç
Con estas pequeñas pinceladas sobre qué no debes perderte del Alcázar, espero haberte convencido de que lo visites la próxima vez que vengas a visita.
Nosotros realizamos la visita todos los días a las 16:00 h, la hora perfecta para verla con menos agobios 😉 , siempre será un placer que hagáis la visita con nosotros.
Por si tienes alguna duda, te dejamos el enlace a la página directa del Alcázar de Sevilla, ya que hay variedad en las entradas, y recuerda que este es la única página oficial del Alcázar: click aquí.
